El encanto es una actitud secreta que manejamos por medio de actitudes, dónde el encanto sale a flote de una manera invisible.

En la mujer el encanto es más probable que en el hombre y requiere de una gran variedad de sutilezas. Es como tu rostro irradia tu estado de ánimo hacia los demás por medio de una buena actitud una buena sonrisa y hasta un tono de voz adecuado.

El encanto también se refleja en una situación de tranquilidad, en modales correcto, en la seriedad que nosotros como jóvenes apliquemos a diferentes situaciones, pues es un elemento poderos de nuestra conducta, que proporciona dar a su existente una gloria. Se compara con el amor porque no se interpreta con fuerza.